BRAUMÜLLER + PINTURA
Como difusor de arte, así como también como viajero con una fuerte preferencia por América Latina, es para mí una gran alegría inaugurar la exposición de Hans Braumüller.
En una ocasión como ésta no se trata ni de explicar en detalle las obras mostradas ni de elogiar el arte en general.
Se mencionarán los cuatro temas siguientes: América Latina y Paisaje, Historia y Sociedad. Estos temas me parecen adecuados para acercarme al fondo de este arte y a las distintas maneras de trabajo de Hans Braumüller.
- En el arte hoy todo está permitido. De las pocas categorías todavía estructurantes de los artistas se eligen preferentemente el país de origen y la nacionalidad como características de diferenciación, por último por razones financieras. Esto es así, a pesar de que muchos artistas desmienten enérgicamente ser representantes de su patria y la historia del arte tiene desde hace tiempo dificultades con las escuelas nacionales y sobre todo con las historias de arte regionales. Por otra parte, el arte nunca puede ser tan estructural, tan humanamente general y tan abstracto que no contenga ningún indicio del entorno de vida de su autor. Inclusive un cuadro monocolor rojo, hasta el famoso cuadrado negro de Malewitsch todavía se puede descifrar desde su marco cultural. Consideramos, por lo tanto, que la naturaleza y la cultura de la patria imprimen su sello a cada artista, cuidándonos de no caer demasiado rápidamente en clichés.
- A pesar de estos reparos: los ordenamientos funcionan. Si uno camina desprejuiciadamente por esta exposición, inmediatamente surge, y sobre todo después de una segunda mirada, la impresión de algo latinoamericano. Esto se debe de seguro, primero y subterfugiamente, al fuerte colorido que se refuerza por citas y símbolos de culturas mesoamericanas antiguas e indígenas actuales. Esto se confirma por la aparición de objetos de collage del arte popular de allí y nuevamente por la utilización del idioma español en algunos trabajos.
- Este tipo de arte no fue concebido en el gabinete. También es gracias a la biografía del artista, la que se construye en el intercambio entre Sudamérica y Europa, lo cual no es tan poco común en esta región del mundo.
- Nacido en Santiago de Chile, como hijo de un padre de origen alemán y una madre chilena con parientes guatemaltecos, Hans Braumüller pasó su período escolar en Hamburgo, para sus estudios universitarios se fue nuevamente a Santiago (en un tiempo político difícil) y desde 1992 vive nuevamente en Hamburgo.
(Observación: Erich Honecker se fue a Chile un año después.)
- Esta biografía de Hans Braumüller también podría ser de tiempos coloniales anteriores, pero obviamente se diferencia por los medios de comunicación actuales – de los cuales hablaremos más tarde – y por una relación con las tradiciones y raíces indígenas de todo Latinoamérica, antes no tomada en cuenta en las sociedades a ambos lados del Atlántico. Son precisamente los artistas – y quizás los comprometidos ecológicamente – los que dirigen su mirada a los indígenas, los indígenas a los cuales la economía y los sistemas sociales muchas veces excluyen, los indígenas a los cuales la clase media burguesa de allí, igual que antes, poco estima y a menudo no toma en cuenta.
- Con su proyecto “Crosses of the Earth” Hans Braumüller colaboró decisivamente para que pudiera efectuarse para la inauguración una “rogativa”, un ritual de los mapuches, en el edificio de estilo neo-renacentista del Museo de Arte Contemporáneo de Santiago de Chile en el año 2000. Esto deja en claro que un proyecto de esta clase solamente se puede hacer en colaboración con un grupo más grande. De ninguna manera es de poca relevancia que artistas de afuera con la fuerza definitoria de su reputación europea, deban cofundar el proyecto. En el gabinete de nuevos medios de comunicación que Hans Braumüller instaló debajo de la escalera, se puede encontrar una película documental sobre el tema.
- Escasos diez años antes, Hans Braumüller todavía estaba en forma permanente en Chile. Un cuadro de este tiempo, el más antiguo de la exposición, usa el acontecimiento lejano del logro de la unidad alemana de quince años atrás con una simbología directa y, sin embargo, con un significado poco explícito. El cuadro con el título “El extranjero alemán” es una paráfrasis muy personal de separaciones y unificaciones sobre el tema de la emigración histórica y el retorno actual, pintada no en forma casual sobre dos paneles que se unen. Entre otras cosas, muestra al antiguo emperador, los colores de las banderas y el negativo de la estrella de la bandera chilena como asociación a la estrella en decadencia del poderío soviético, quizás también como entonces se acostumbraba, una estrella recortada del escudo negro, rojo y dorado de la República Democrática Alemana.
- Este cuadro se encuentra ubicado en el sector de la exposición en el cual se encuentran afirmaciones políticas directas, como ser “Mejor para el pueblo”, así el título del cuadro más nuevo de la exposición. Con estos dos cuadros se hace visible una clara continuidad del interés político de Hans Braumüller y las paráfrasis que de ahí resultan. Existe allí, antes de los elevadores, una sección de la exposición que está dedicada a la contienda electoral que cobró actualidad en forma sorpresiva.
- Pasemos ahora al tema del PAISAJE: Quisiera hacer de este concepto – quizás sin el consentimiento total del artista – el concepto central de Hans Braumüller. Porque, independientemente de los títulos, la mayoría de los cuadros grandes me parecen ser paisajes, o por lo menos pueden ser interpretados como paisajes. En colores fuertes, pero muchas veces en una luz más bien oscura, se muestran escenarios los que – además de extraños – parecieran situarse bajo la luz nocturna o de la luna. Sin embargo, son cuadros que espejan profundidad espacial, pero están llenos de un sinnúmero de elementos extraños al paisaje tradicional. Ya en uno de los paisajes más antiguos, el cuadro de un valle desértico con el título “Pájaro en el Valle Central” hay varias mezclas: allí se funden las rocas con la forma de un gran pájaro. También Magritte pintó aves de piedra, pero lo que en el belga llevó a una paradoja hiperrealista del pensamiento, le sirve a Hans Braumüller a fines completamente distintos: En el crecimiento conjunto del paisaje grandioso y divergente con los animales de allí capaces de sobrevivir, surge entonces un paisaje de significados que no se entiende en absoluto como fotográfico. No es el cuadro de una posible experiencia de la naturaleza, sino la esencia de ella, el cuadro de una naturaleza desagradablemente divergente y hostil al ser humano es cargado míticamente hacia un paisaje individual del alma lleno de significados ocultos. En este contexto, también es interesante que se ha observado recientemente que algunos montes de las regiones desérticas del norte de Chile y del sur del Perú no son de origen natural, sino que son restos de grandes y muy tempranos conjuntos de pirámides.
- También todos los paisajes posteriores de Hans Braumüller constituyen un espacio exterior saturado con elementos de la historia individual y colectiva. Muchas veces éstos surgen principalmente de elementos de ese tipo: Así el fondo del cuadro – grande, que consta de nueve partes – titulado “Beso”, que se interpreta muy bien como paisaje, está construido con rasgos de escritura. Al contrario, el vivaz paisaje selvático de animales surgió del patrón de una manta bordada indígena mexicana, usando ésta como lienzo. Los siguientes cuatro cuadros de tamaño grande muestran paisajes repetidamente quebrados con ángeles cayendo e interferencias de imágenes tecnoides. En los paisajes más bien oscuros de Hans Braumüller se muestran menos noches tibias bajo la Cruz del Sur, sino más bien la oscuridad de la historia del Continente, cuya historia prehispánica todavía contiene muchos enigmas y cuya historia reciente ha visto mucha violencia. Empero no se trata solamente de lo representado, sino que también se trata de la representación y nuestra propia percepción, que además de lo compleja, está informada en exceso, de modo que uno ya no se puede imaginar.
- Recordemos como explicación conceptual que “Naturaleza” es aquello que hoy en día escasamente se encuentra, lo que aún no ha sido intervenido por el hombre y que “Paisaje” es siempre algo ya configurado. “Paisaje” no solamente es la naturaleza transformada para la producción agraria, también es el paisaje cultural en el sentido de un espacio saturado de los lugares históricos, huellas y recuerdos. Y un paisaje así puede llegar a ser un código, un paisaje así tiene varias significaciones. Ya sea un jardín ornamental o un bello campo de batalla.
- Esta multiplicidad de signficados vale principalmente para cada representación en imágenes. También la escritura de los mayas – Hans Braumüller utiliza a menudo estos signos como carácteres de imprenta – se interpretó durante mucho tiempo solamente como ornamental. Mucho más tarde se reconoció como signos linguísticos y desde hace poco es posible leerla. En esto no se trata de una percepción “falsa” o “correcta”, sino es más bien de suponer que esta artificialización no menor y de varios significados es enteramente a propósito. Con ello se hace también posible el uso de la letra – parecido al idioma chino – como imagen, metasigno y carácter de imprenta.
- Debido a que con estas consideraciones de la saturación del paisaje con elementos que al mismo tiempo se ordenan y cuentan historias, ya hemos tratado conjuntamente el tercer tema enunciado “Historia”, trataremos inmediatamente el cuarto tema “Sociedad”. Está claro que el paisaje de significados es también político, sin ser casualidad que existe el concepto de “paisaje de partidos”. Y este concepto fascina a Hans Braumüller. Incluso implementó un dominio web bajo este concepto. Y esto entonces muestra una arista muy diferente del artista. Hans Braumüller pinta cuadros y él pinta con gusto, más bien en forma salvaje que cuidadosamente, en acrílico y óleo sobre lienzo, paño de muselina y otros soportes. Pero esto no significa que él es solamente un artista tradicional de taller, sino haciendo una crítica cariñosa, no es únicamente un “mero pintor”. Por supuesto, los artistas de su generación están en red, tienen sus computadores, ocupan dominios de internet propios, en los cuales mezclan producción analógica y digital. Ellos cooperan de variadas formas con los nuevos medios – en esta exposición también hay un cuadro en el cual corre un video de Claudia Liekam.
- La hoy en día omnipresente compilación, el juntar partes dispares, es común a ambos medios, a la pintura y naturalmente al collage, pero también a la composición computacional. En Hans Braumüller ciertamente todavía está visible la bisagra, en él se hace completamente claro, como fue necesario, desarrollar primero Formas artísticas sin el internet , las que a continuación pudieron ser traspasadas a la red. Me refiero aquí al ámbito especial del Mail-Art.
- Mail-Art es una forma de comunicación artística concida desde los años 60, cercana a las ideas de Fluxus. Se intercambian pequeños artefactos por la vía postal; pequeños objetos encontrados, citas de mundos de imágenes populares y sellos tienen en ello un rol importante. También es importante que siempre se refleja el medio y que se entremezclan los límites del copyright. Este arte “pobre”, con el cual miles de artistas se comunican por la web en el mundo, también ofreció a los países de la periferia de antes una buena posibilidad de expresión. Hans Braumüller dijo una vez, “hacer algo con pocos y módicos medios ”, que aquello era típicamente latinoamericano – y ciertamente el Mail-Art es uno de esos medios. Merece admiración en este campo de trabajo el “Mail-Art-Mural”, una impresión digital, es decir, una fotocopia con motivos típicos de Mail-Art. Para ese mural es la primera vez que se usan también las ventanas como soporte dentro de la serie de exposiciones de la “Techniker Krankenkasse”.
- Es destacable en el Mail-Art que un intercambio de esa índole casi anticipa lo que es posible en la internet. Y así un intercambio de imágenes y textos se encaminan crecientemente hacia la internet. En el ya mencionado gabinete junto a una fuente con objetos reales de Mail-Art cooperativo dos monitores muestran un show de diapositivas con más ejemplos. También el proyecto ya mencionado “Crosses of the Earth” surgió de una acción de Mail-Art con finalmente la participación de 340 artistas. Así, en una acción a nivel mundial, la cruz cristiana se transformó en un signo universal y, por decirlo, con la mirada a la exposición en Chile, la cruz fue descolonizada hacia una cruz chacana como también a la cruz del Sur escrita en el cielo. Pero desarrollar todo este tema aquí nos llevaría demasiado lejos.
- Quien una y otra vez se compromete en procesos colectivos, en trabajos colectivos y de grupo, como Hans Braumüller, fuera del ámbito de la producción artística no puede ser un ser humano completamente no social y no político. Muchos de sus trabajos contienen implícitamente insinuaciones políticas. En esta exposición puso esto en escena con mano ligera, pero también en forma explícita: Hay afiches en los que el artista usa los eslóganes partidarios de bastante poco significado para hacerse propaganda él mismo. Está ese cuadro “Better for the People” en el que los colores de camuflaje militar del fondo del cuadro se transforman en un paisaje con personas volando despreocupadamente por ahí. Y existe la presentación central de elementos de una instalación con cama, lámpara y polera. La polera anuncia “hacer lo importante”, que cuelga sobre un gancho que pide “amor”. Seguramente es a propósito, que uno piense con absoluta validez en la ya estúpida divisa, que existe el dicho: “Cambiar de opinión como cambiarse la camisa”.
- Y justo al lado está el trabajo de cama con el título “La Conciencia”. Y sobre este diván está escrito: CAPITAL / PODER / LIBERTAD. Con esto estamos directamente en la política. Porque este trabajo con color de camuflaje rojo y patas doradas es una afirmación completamente clara, precisamente una antorcha en estos tiempos.
[lo siguiente en tono declamatorio]
Una antorcha, que yo….. este….. uno no puede dejar de anunciar suficientemente y la que nosotros, mis amigos y especialmente los otros……… y sobre todo….este, ustedes ya lo saben, por lo tanto el capital libera, o, cómo ya lo dije, el trabajo hace capital….. o poder capital o algo así. Por lo tanto y eso, Damas y Caballeros, vale también para la nueva fuerza de la nación en el progreso de los seres humanos a través del trabajo aquí usar … este…las oportunidades, también para nuestros adversarios políticos. Ustedes ya lo saben. Buenas noches.
- Pero no se dejen perturbar. El verdadero mensaje del arte precisamente no es este tono subido y hueco de la aparente certidumbre. El mensaje del arte es siempre la ambivalencia, la pregunta, incluso la duda, el repintar, el intento, la cooperación con otros – todos aspectos que Hans Braumüller demuestra aquí.
© Hajo Schiff*, Hamburgo 09/2005
Hajo Schiff es Crítico de Arte, quien escribe para el Kunstforum y muchas otras publicaciones
DISCURSO DE HAJO SCHIFF PARA LA INAUGURACIÓN DE LA EXPOSICIÓN + Pintura DE HANS BRAUMÜLLER
DEL 05 DE SEPTIEMBRE 2005, GALERIA TK